La justicia francesa absolvió este martes al veterano cineasta Roman Polanski, acusado de difamar a la actriz británica Charlotte Lewis, que lo acusó de haberla violado en la década de 1980.
El director franco-polaco, al que varias mujeres han acusado de agresión sexual y violación, había tachado la acusación de Lewis de “odiosa mentira”.
Los jueces del tribunal correccional de París no debían pronunciarse sobre si el director, de 90 años, violó o no a Lewis, sino sobre si abusó de la libertad de expresión en una entrevista con la revista Paris Match de 2019.
En aquella entrevista, Polanski calificó de “odiosa mentira” la acusación de la actriz, quien en 2010 afirmó que este la “agredió sexualmente” durante un ‘casting’ en su domicilio en París en 1983, cuando ella tenía 16 años.
“Como ven, la primera cualidad de un buen mentiroso es una excelente memoria. Charlotte Lewis siempre es mencionada en la lista de mis acusadoras sin que nunca se señalen [sus] contradicciones”, añadió el director en la entrevista.
La decisión de la justicia francesa coincide con el día de la apertura del 77º Festival de Cannes, que abrió sus puertas en la ciudad de la Costa Azul este martes con una nueva oleada de movilizaciones contra la violencia sexual en el cine francés.
Durante el juicio por difamación celebrado en marzo, Lewis, que actuó en la película Piratas de Polanski en 1986, declaró que fue víctima de una “campaña de difamación” que estuvo a “punto de destruir” su vida tras sus revelaciones.
Los abogados de Polanski, que no asistió al juicio, citaron una entrevista de Lewis publicada en 1999 por el desaparecido periódico sensacionalista británico News of the World. El diario atribuía a Lewis estas declaraciones: “Quería ser su amante (...) Probablemente lo deseaba más que él”. Pero la actriz denunció que no eran “exactas”.
Los abogados de Polanski estiman que su cliente fue “abandonado a merced” de la opinión pública en “el asfixiante contexto del #Metoo” y denuncian un “juicio absurdo”. A lo largo de su carrera, varias mujeres han acusado al ganador de tres premios Óscar y de una Palma de Oro en el festival de Cannes por El pianista de agresión sexual y violación, algunas cuando eran menores. El director siempre ha negado estas acusaciones por hechos prescritos, que no le han impedido trabajar.
Desde hace más de 40 años, está considerado como un prófugo en Estados Unidos, donde fue condenado por mantener relaciones sexuales ilegales con Samantha Geimer, una menor de 13 años.
En 2025, el director deberá enfrentar un juicio civil en la ciudad estadounidense de Los Ángeles, después de que una mujer lo acusara de violarla en 1973 cuando era menor.