Editorial

Europa en peligro

¿Cuántas empresas europeas figuran entre las diez más valiosas del mundo? ¿Cuántas universidades de Europa encabezan la lista de las mejores del planeta?...

Editorial | | 2024-06-11 00:10:00

¿Cuántas empresas europeas figuran entre las diez más valiosas del mundo? ¿Cuántas universidades de Europa encabezan la lista de las mejores del planeta? ¿En las lista de las gigantes de la tecnología mundial cuáles pertenecen al viejo mundo? ¿Qué porcentaje de las patentes, inventos e innovaciones que se registran en el mundo provienen de Europa?

La respuesta a estas preguntas es penosa en todos los casos y por eso mismo es que se habla hoy de la decadencia de occidente, pues fue en Europa donde nació y se desarrolló la cultura que conquistó el mundo y estableció una hegemonía que perdura desde hace más de dos milenios, con los griegos y romanos, aunque formalmente se reconoce su liderazgo global a partir del Siglo XVI.

Resulta inaudito que en este momento, los europeos se hayan vuelto tan dependientes del mundo. Su energía la obtienen de Rusia, la seguridad se las provee Estados Unidos y su comercio está hoy en manos de los chinos, que se han apoderado de sus empresas, inundando con sus baratijas un mercado que siempre fue exigente y competitivo.

Los europeos abandonaron el “trabajo sucio”; ahora son todos ecologistas, pacifistas y progresistas, mientras disfrutan la buena vida, tanto que ni siquiera se dieron cuenta de la gran amenaza, especialmente de Rusia, cuyo líder quiere repetir las hazañas de los jerarcas comunistas, a la cabeza de Stalin, que mantuvieron bajo su dominio a más de la mitad de Europa, con epicentro nada menos que en Berlín, donde construyeron la famosa “cortina de hierro”.

Después de haber protagonizado a fuego y sangre todas las batallas a favor de la modernidad, la justicia, los derechos humanos, el progreso científico y la democracia, los europeos se achancharon y se sumergieron en en el fango del insostenible estado de bienestar que los ha vuelto débiles frente a los eternos enemigos de la libertad. Europa tiene menos del 20 por ciento de la población, representa el 20 por ciento del producto bruto interno del mundo, pero tiene el 50 por ciento de gasto social global, factor que los ha vuelto cobardes y perezosos.

Europa enfrenta un momento crítico en su historia, donde la necesidad de reinventarse es más acuciante que nunca. Adaptarse a los tiempos actuales y poder "hablar el lenguaje del poder" son cuestiones vitales para su supervivencia y relevancia en el escenario global.

Los desafíos de la Unión Europea (UE) son enormes: reforzar la seguridad en un sentido amplio, que abarque desde la defensa hasta la autonomía económico-estratégica y mejorar la competitividad para evitar la subordinación a otras potencias. Esta reinvención no será posible sin profundas reformas que aborden la transición energética, la cohesión social y territorial. Europa debe recordar la ambición de los padres fundadores y actuar con una determinación comparable a la de hace 70 años.

La convergencia ideológica entre China y Rusia, que rechazan los valores occidentales de derechos humanos y democracia, representa un desafío complejo para la UE. Esta confrontación exige que la Unión Europea se prepare para defender sus valores con mayor determinación y unidad. Tal como lo dice el presidente francés Emmanuel Macron, Europa puede morir y eso depende de nuestras decisiones.