Una década después, la Plaza de Cibeles, ese punto de encuentro en Madrid para los festejos futbolísticos, se tiñó de rojo pasión y de pura emoción. Miles de personas recibieron a la selección española de fútbol a su llegada al Palacio de Comunicaciones, sede del Ayuntamiento de Madrid, punto final de las celebraciones por la conquista de la Eurocopa 2024 que se han desarrollado en la capital de España.
El autobús descapotado, que previamente había recorrido Moncloa, la calle Alberto Aguilera, la glorieta de San Bernardo, la Plaza de Colón o la Puerta de Alcalá entre la alegría de multitud de seguidores, llegó cerca de las 10 de la noche madrileña al ayuntamiento capitalino, donde le esperaba el alcalde José Luis Martínez-Almeida. Allí comenzó una fiesta en la que está faltando música y testimonios de los flamantes campeones continentales.
El campeón de la Eurocopa comenzó el raid temprano, al mediodía de Berlín, desde donde volaron hacia Madrid. Tras aterrizar allí al filo de las tres de la tarde y disfrutar de un breve periodo de descanso, el plantel se encaminó hacia sus dos visitas oficiales.
La primera de ellas tuvo lugar en el Palacio de La Zarzuela, donde fueron recibidos por el rey de España, Felipe VI; quien los recibió acompañado por la reina Leticia; y por las hijas de ambos; la Princesa Leonor y la Infanta Sofía. Y la segunda en el Palacio de la Moncloa, donde les esperaba el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; junto al presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Rodríguez Uribes; y la ministra de Educación, FP y Deportes, Pilar Alegría.
El polémico gesto de Carvajal
En esta segunda parte, el gesto despectivo del lateral Daniel Carvajal hacia el presidente Pedro Sánchez se volvió viral primero en España y luego en todo el mundo. El ingreso a la sede gubernamental lo encabezó Álvaro Morata, quien llevaba la Copa y fue el primero en saludar afectuosamente a Sánchez. Detrás, Carvajal, apenas le extendió la mano, casi con desprecio, y ni siquiera hizo contacto visual. Después, Joselu tuvo una actitud similar.
Carvajal, defensor del Real Madrid y uno de los referentes del plantel español, ha mostrado en los últimos años disidencias con el PSOE y ahora, una vez más, las deja en claro. Cuando fue desplazado Luis Rubiales, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol que fue desplazado por el gobierno tras la polémica en el Mundial femenino con la jugadora Jenni Hermoso por el beso no consentido, Carvajal evitó condenar las acciones de Rubiales.
“Te da miedo, te da miedo opinar, te da miedo decir cualquier cosa que puedas equivocarte o que se pueda interpretar de manera errónea. Y creo que por eso la gran mayoría de los futbolistas españoles no se han pronunciado. Tampoco podemos posicionarnos o condenar una parte u otra previamente sin conocer realmente qué ha pasado, que se ha estipulado, porque a día de hoy ella no ha presentado tampoco la denuncia”, expresó en aquel momento.
Más allá de este entredicho, la fiesta siguió en Plaza de la Cibeles. Los jugadores bajaron del micro y se ubicaron en un escenario. El primero en hablarle a la gente fue el capitán Alvaro Morata. Primero invitó a todos a cantar “campeoooones, campeooones” y luego dijo: "Ha sido un lujo ser el capitán de esta selección. Puede ser que a veces la meta y a veces no, pero me he dejado la vida por esto"".
Embriagado de euforia, Morata se animó a competir con el programa que conduce Diego Iglesias en las tardes de Radio con Vos y que se llama “Mejor país del mundo”. El capitán bramó: “"Sabía que mis compañeros eran muy buenos. Tenemos la mejor comida, los mejores sitios de vacaciones. Somos el mejor país del muuuuuuuuuuuuuuuundo. Ha sido mágico. Gracias a todos los compañeros por esto"".
Más tarde, el capitán fue llamando a cada uno de sus compañeros y a cada uno le dedicó una arenga especial. Para la llegada de Carvajal exclamó: “""Con el número 2 el jabalí de España, el pitbull. ¿Dónde está Musiala? Daaaaaaniel Carvajal”.
