Argentina expresó el sábado (07.09.2024) su
rechazo a la decisión del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de
"revocar unilateralmente” la autorización a Brasil de representar los
intereses del país argentino y custodiar sus instalaciones diplomáticas en
Caracas, informaron fuentes oficiales.
"La República Argentina rechaza dicha
medida unilateral y advierte al gobierno venezolano que debe respetar la
Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas que consagra la
inviolabilidad de los locales de las misiones”, indicó la Cancillería argentina
en un comunicado.
Entre la noche de este viernes y la mañana de
este sábado, opositores a Maduro denunciaron un estado de "asedio” en la
embajada de Argentina en la capital venezolana – que estaba bajo protección de
Brasil tras la expulsión de la misión diplomática del país austral-, donde se
encuentran seis asilados.
"Asimismo, (Argentina) denuncia ante la
comunidad internacional que en estos momentos patrullas de los servicios de
inteligencia y fuerzas de seguridad venezolanas rodean la residencia oficial en
Caracas. El régimen de Maduro ha anunciado que ha revocado unilateralmente la
autorización conferida al Brasil para custodiar el inmueble oficial”, agregó
Cancillería.
Brasil "sorprendido" con decisión de
Caracas
El gobierno de Javier Milei también brindó su
"reconocimiento a la hermana República Federativa del Brasil” por
representar los intereses argentinos en Venezuela y agradeció "su
compromiso y responsabilidad en velar por la custodia de los inmuebles argentinos
en dicho país”.
Por su parte, Brasil se declaró
"sorprendido” con la decisión del gobierno venezolano, al que le recordó,
en una nota oficial, el carácter de "inviolabilidad, en los términos de la
Convención de Viena” y aseguró que "permanecerá con la custodia y defensa
de los intereses argentinos hasta que Argentina designe a otro Estado
aceptable”.
Brasil se ocupa desde agosto de la custodia de
las sedes diplomáticas de Argentina y Perú en Venezuela, así como de la
representación de sus intereses y ciudadanos en el país caribeño, tras la
expulsión de los miembros de ambas legaciones, tras rechazar la proclamación de
Maduro como vencedor de las elecciones del 28 de julio.