El presidente Luis Arce Catacora hizo un llamado a la comunidad internacional este lunes durante una reunión con el cuerpo diplomático acreditado en Bolivia, subrayó la necesidad de unir esfuerzos ante la grave crisis de incendios forestales que afecta al país.
“La magnitud del desastre que enfrentamos exige que esta lucha sea de todos, no solo de Bolivia”, afirmó Arce, en relación a la emergencia que llevó al Gobierno a la declaración de desastre nacional.
En el encuentro, funcionarios del Ministerio de Medio Ambiente y Agua presentaron un informe actualizado, revelando que los incendios han devastado aproximadamente 6,9 millones de hectáreas en todo el territorio nacional. De esta cifra, 4,6 millones de hectáreas corresponden a bosques y 2,3 millones a pastizales, siendo Santa Cruz y Beni los departamentos más afectados.
“La situación que estamos atravesando en el país amerita una mayor cooperación y esfuerzo por cada uno de nosotros, porque este tipo de fenómenos ya no solamente corresponde a la lucha de un solo país”, explicó Arce en el inicio de la reunión.
Los gobiernos de Venezuela y Francia enviaron bomberos y equipos aéreos para combatir los incendios. El embajador venezolano, César Gabriel Trómpiz, anunció que 61 bomberos de la Fuerza de Tarea Humanitaria Simón Bolívar están operando en Bolivia, y se evaluará aumentar la cooperación. Por su parte, la embajadora de Francia, Helene Roos, informó que su país ha contribuido con un helicóptero para ayudar en las tareas de extinción.
Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) gestionó una donación de medicamentos para tratar las afectaciones causadas por el humo. Alma Morales, representante de la OMS, mencionó que se están movilizando más recursos para continuar con la asistencia médica.
En representación de Colombia, la embajadora Elizabeth García expresó su solidaridad y mencionó la posibilidad de enviar bomberos desde la región amazónica para sumarse a los esfuerzos de mitigación en Bolivia.
El encuentro con el cuerpo diplomático tuvo lugar tras la emisión del Decreto Supremo 5235, que declara oficialmente la situación de desastre nacional. Este decreto establece los mecanismos para canalizar la cooperación internacional y coordinar la respuesta de los distintos niveles del Estado frente a la emergencia. Asimismo, se prevé la reorientación de recursos financieros a través del Ministerio de Economía y el diseño de un plan de recuperación postdesastre liderado por el Ministerio de Planificación del Desarrollo.