Otra gota de agua al vaso. El plantel de Blooming decidió ingresar a un nuevo paro ante la falta de sueldos y atención de los dirigentes. El entrenador Carlos Bustos vuelve a ver frustrado su trabajo en medio del parate del torneo Clausura por la doble fecha de eliminatorias sudamericanas.
La academia cruceña se fue motivada al receso tras el triunfo de visitante sobre San Antonio Bulo Bulo (0-1). Richet Gómez le dio la victoria que los colocó en el sexto lugar de la tabla del Clausura con 26 unidades, mientras que en la tabla acumulada suma 40 en la quinta casilla, ocupando la zona de Copa Sudamericana.
Estos resultados se ven empañado por los problemas económicos que arrastra el club, pues en la siguiente semana se cumplirán cuatro meses y medio de deuda salarial al primer plantel.
La misma situación vivieron en el anterior receso del Clausura: frenaron los entrenamientos hasta que la dirigencia cumpla con al menos una cuota, pero terminaron aceptando el 50%. Ahora la situación se torna difícil porque el fútbol está parado y no hay ingresos por recaudación.
Bajo este panorama, Bustos ve frustrado su trabajo como entrenador para llegar en mejores condiciones al próximo partido que será ante Wilstermann, el sábado 19 de octubre en el estadio Félix Capriles.