Con la temporada de lluvias ya en curso, el canal de drenaje ubicado en la avenida Internacional y octavo anillo, zona de la Villa Primero de Mayo, presenta un panorama preocupante. La acumulación de maleza, bolsas plásticas y agua estancada han movilizado a los vecinos de los barrios circundantes, como San José y Santiago Parada, quienes piden a la Alcaldía municipal una pronta limpieza de la zona para evitar posibles problemas de inundación y salud. Afirman que esta situación además ocasiona la proliferación de mosquitos.
Marina Velásquez, presidenta del barrio San José, señaló que hace cuatro o cinco meses solicitó a la subalcaldía local el mantenimiento del canal, pero le informaron que no contaban con maquinaria para realizar el trabajo.
“La situación ha empeorado con las lluvias; el canal está lleno de basura y la maleza llega hasta el centro de salud", comentó Pablo Pimentel, presidente del barrio Santiago Parada. Similar panorama constató este diario en la avenida Mariscal Santa Cruz, entre quinto y sexto anillo donde la maleza llegaba hasta la cintura. En el cuarto anillo y Santos Dumont también había maleza en la intersección, pero personal municipal realizó trabajos de limpieza el miércoles.
Similar situación ocurre en la plazuela del barrio minero de la zona del Plan 3000 donde la maleza es notoria. El lugar colinda con una Unidad Educativa.
Mayra Soliz, vecina de la zona indicó que hace semanas se ha notado más el pasto alto y se ha sentido la proliferación de mosquitos que abundan al finalizar la tarde por lo que pide a las autoridades una limpieza del lugar.
La empresa responsable de la limpieza admitió que la escasez de diésel ha dificultado sus labores de mantenimiento en espacios públicos. Otra dificultad es el retraso de varios meses en el pago del municipio, lo que complica cumplir con las planillas del personas.
Luis Alpire, agrometeorólogo, recordó que el periodo de lluvias en el país comenzó en noviembre y se espera que se extienda hasta marzo del próximo año. La acumulación de agua estancada, sumada a la basura, aumenta los riesgos de insalubridad y empeora los problemas de hedor en las zonas afectadas.