El presidente Ronald Raldes pidió licencia temporal a su cargo en su segundo ciclo al mando del club Oriente Petrolero, debido a temas familiares que han interrumpido la labor del dirigente, en medio de una crisis económica y deportiva que atraviesa la institución.
Finalizada la tarde de este viernes, el club verdolaga dio a conocer la decisión de Raldes (2023-2027), a través de un comunicado, que sorprendió a los aficionados orientistas, pese a que la mayoría está en contra de la gestión del futbolista retirado.
De acuerdo con los estatutos de este club cruceño, el primer Vicepresidente asumirá la conducción de manera interina. En este caso, el dirigente René Urioste Coimbra tendrá que dirigir el destino orientista, como primero objetivo, finalizar la temporada sacando adelante a la entidad y en lo posible asegurar la clasificación a un torneo internacional.
"Estoy seguro de que, bajo su liderazgo, la gestión del club continuará con la misma dedicación y compromiso que hemos mantenido hasta ahora", indica la nota firmada por Raldes, quien dejó a su elenco en un mal momento, en un ambiente incierto.