Las fuerzas rusas batieron durante las últimas horas de este martes (26.11.2024) un nuevo récord en el número de drones lanzados contra Ucrania en un solo ataque, al emplear contra territorio de su vecino un total de 188 aparatos kamikaze no tripulados, según informó la Fuerza Aérea ucraniana.
"Durante el ataque nocturno, el enemigo lanzó un número récord de drones de combate de tipo Shahed -de fabricación iraní- y no identificados", así como cuatro misiles balísticos Iskander-M, indicaron las autoridades ucranianas, que señalaron que resultaron afectadas infraestructuras "esenciales” y también edificios residenciales en varias regiones.
Las defensas aéreas de Ucrania lograron derribar 76 de estos drones en 17 regiones del país, mientras que otros 95 de los aparatos no tripulados lanzados por Rusia perdieron el rumbo debido a las interferencias de los medios de guerra electrónica del Ejército ucraniano. Otras cinco aeronaves no tripuladas siguieron rumbo a territorio bielorruso.
Daño "sustancial”
Uno de los efectos del ataque fue el corte de la electricidad en el 70 por ciento de la región occidental de Ternópil, dijo su gobernador en una emisión televisiva. Vyacheslav Nehoda reconoció que el daño fue "sustancial” y que afectaría el suministro eléctrico en esa zona, que cuenta con 220.000 habitantes, y otras regiones aledañas durante "un largo período”.
En Kiev, en tanto, la alerta aérea se extendió por cinco horas y diez drones lanzados por los invasores rusos fueron derribados en esa región.
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que sus baterías antiaéreas habían derribado 39 drones ucranianos sobre seis regiones del país, además de la península ucraniana ocupada de Crimea. Según el parte castrense, 24 aparatos no tripulados, más de la mitad de los abatidos, fueron destruidos sobre el territorio de la región meridional de Rostov, fronteriza con Ucrania.