El paro de los ingenios arroceros realizado este miércoles culminó con una concentración en la ciudad de Montero donde se emitió un pronunciamiento de cuatro puntos en el que piden seguridad jurídica, remarcan que no permitirán más atropellos y aceptan la convocatoria al diálogo hecha por el gobierno nacional.
Las determinaciones fueron leídas por el dirigente del sector, Jimmy Prado, en el punto donde se cortó la ruta entre Montero y Okinawa este miércoles.
“No permitiremos ningún atropello a nuestro sector, ni más abusos o violaciones a nuestros derechos. Ya estamos bastante golpeados por la crisis que afecta a todo el pueblo boliviano”, remarcó Prado, presidente de los Ingenios Arroceros del Norte (Ingenor).
El dirigente confirmó que una comitiva viajará a La Paz para participar del diálogo con el gobierno este jueves. En otro de los puntos, piden que se suspendan los procesos iniciados contra los ingenios arroceros.
El conflicto detonó la semana pasada cuando comisiones de policías y fiscales intervinieron en cinco ingenios de Montero y los precintaron. Entonces, el fiscal Alberto La Fuente afirmó que se había determinado el decomiso del arroz almacenado para ponerlo a disposición de la estatal Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa).
Sin embargo, Gian Carla Bonjanic, representante del viceministerio de Defensa del Consumidor, aclaró que durante los operativos del pasado viernes no se determinó la confiscación del arroz hallado en los ingenios, aunque indicó que estas industrias están ocultando el producto, ya que indicaron que no contaban con el mismo, pero solo en cinco de ellos se contó unas 20 mil fanegas disponibles.
Prado confirmó que no les quitaron ni un kilo de arroz, pero por la rápida reacción de los asociados y trabajadores.