Youssoufa Moukoko vuelve a ser protagonista de un escándalo extradeportivo. El jugador del Borussia Dortmund cedido en el Niza ya había sido objeto de crítica hace un tiempo por haber falsificado documentos acerca de su nacimiento, a lo que se han unido las declaraciones de su supuesto padre Joseph Moukoko afirmando que el atacante alemán en realidad tiene 24 años y él no es su progenitor.
“Declaro bajo juramento: Youssoufa Moukoko no es hijo biológico mío ni de mi esposa Marie Moukoko. Tampoco nació el 20 de noviembre de 2004 en Yaundé, Camerún”, dice. Esto supondría un varapalo muy duro para un jugador que ya había batido con anterioridad varios récords de precocidad en la Bundesliga.
De hecho, la televisión ProSieben ha emitido un documental donde Joseph fue más allá, afirmando que él mismo se encargó de falsificar los documentos sobre su nacimiento en Camerún para además hacerse pasar por su padre. "En realidad nació el 19 de julio de 2000. Ahora figura como nacido el 20 de noviembre de 2004", declaró en dicho documental.
Esto además perjudicaría a su propio club y a la selección alemana, ya que en 2018 Moukoko consiguió el campeonato liguero con el Borussia Dortmund en categorías inferiores y en 2021 consiguió el Europeo sub-21 con Alemania.
El Borussia Dortmund de momento se ha aferrado a la presunción de inocencia de Moukoko, afirmando que en los documentos legales a los que han tenido acceso el futbolista tiene 20 años actualmente y que sus padres en teoría son los que figuran en dicho documento.
"Los padres biológicos de Youssoufa Moukoko se determinan en base a documentos oficiales de identidad y certificados de nacimiento emitidos por las autoridades alemanas. Estos documentos siguen siendo válidos hasta el día de hoy y constituyen la base para las autorizaciones de juego y licencias para clubes, tanto en el ámbito nacional como internacional", afirma el comunicado emitido por el vigente subcampeón de Champions League.
Este escándalo se suma a la investigación que hizo el medio alemán Bild en Camerún, donde no encontraron rastro de ningún Youssoufa Moukoko nacido en 2004 pero sí la existencia de un Youssoufa Mohamadou nacido en 2000, registrado como hijo de Ousman Mohamadou -un taxista local-. Además, la propia gente del barrio afirmó esta versión. Durante los próximos meses este caso puede escalar hacia el siguiente nivel, convirtiéndose en uno de los grandes escándalos del mundo del fútbol.
