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Un amuleto romano del siglo III reescribe la historia del cristianismo en Europa

Un antiguo texto puramente cristiano hallado en Alemania sitúa la expansión de la religión en el norte de Europa al menos 50 años antes de las evidencias materiales conocidas previamente.

La lámina de plata hallada en 2017 en Alemania.
Internacional | RT | 2024-12-20 09:23:17

El reciente desciframiento de los textos cristianos contenidos en un amuleto de plata romano hace cambiar la historia de la expansión del cristianismo en el territorio de la actual Alemania, según comunica el Centro Leibniz de Arqueología en Mainz.

El pequeño artefacto, que mide 3,5 cm de largo, consiste en un rollo hecho de una fina lámina de plata. Fue descubierto en 2017 en una necrópolis de la antigua ciudad romana de Nida, hoy situada dentro de Fráncfort del Meno (entonces parte del territorio de la provincia Germania superior del Imperio romano).

Su datación del 230 al 270 d. C. convierte a este amuleto en la evidencia más antigua del cristianismo en la región, al menos 50 años antes que los hallazgos conocidos previamente, destaca el Ayuntamiento de Fráncfort.

Las referencias escritas más tempranas a los primeros grupos cristianos en la Galia y en la provincia de la Alta Germania se remontan a finales del siglo II. Sin embargo, las pruebas materiales de su existencia en las zonas alpinas del norte del Imperio romano no databan de antes del siglo IV d. C.

Ahora, el desciframiento de varios fragmentos de un texto de 18 líneas inscritas en la lámina de plata hallada en Fráncfort que testimonia la fe cristiana de su portador fue posible gracias a una tomografía computarizada realizada en el Centro Arqueológico Leibniz, con sede en la ciudad de Maguncia.


Utilizando la tomografía computarizada, los investigadores pudieron crear un modelo 3D de la chapa laminada y después unieron virtualmente segmentos individuales del escaneo, pieza por pieza, de modo que todas las palabras se hicieron visibles.

La inscripción se inicia con una mención a San Tito, un discípulo y confidente del apóstol Pablo, e incluye además la exclamación "¡Santo, santo, santo!", una conocida fórmula de la liturgia cristiana. Además, el texto menciona una cita casi literal del himno a Cristo de la "Epístola a los Filipenses" (Fil. 2, 10-11).


En el siglo III d. C., en una época en la que todavía estaban siendo perseguidos, era un riesgo identificarse como cristiano. Sin embargo, un hombre en la antigua Germania aparentemente pensaba que su fe era "tan importante que se la llevó a la tumba", apunta el comunicado del ayuntamiento.