
El presidente del Adana Demirspor de la Superliga turca, Bedirhan Burak, presentó su renuncia este lunes, al día siguiente de que su equipo abandonase el campo de juego a los 34 minutos del partido contra el Galatasaray, en protesta por un penal en su contra.
Adana Demirspor, el último en la tabla con cinco puntos, se enfrentaba al líder del campeonato, Galatasaray, que suma 57 unidades. A los 12 minutos, el árbitro sancionó un penal a favor del equipo de Estambul, que fue convertido por su nueva estrella, el español Álvaro Morata.
El primer tanto de Morata en el campeonato turco llegó después de una infracción señalado sobre el belga Dries Mertens, que, aparentemente, simuló una zancadilla del defensa Semih Güler.
Tras numerosas protestas al considerar que la falta no existió, los jugadores del Adana Demirspor decidieron retirarse del encuentro a los 34.
El abandono del partido ha reavivado el debate en Turquía sobre la actuación de los árbitros. Fenerbahçe, principal rival de Galatasaray en la lucha por el título y segundo en la tabla con 54 puntos, denunció en redes sociales que este incidente es otro ejemplo de un supuesto trato de favor al Galatasaray durante la temporada.
La renuncia de Burak fue anunciada esta mañana a través de un mensaje en X, donde explicó que, pese a todos sus esfuerzos, la situación se había vuelto insostenible.
Este episodio se produce en un contexto de una gran tensión en el fútbol turco, donde el técnico de Fenerbahçe, José Mourinho, ha criticado abiertamente a los árbitros, y los clubes más grandes del país se acusan mutuamente de irregularidades.
Se espera que en los próximos días la Federación Turca de Fútbol (TFF) tome una decisión oficial sobre el abandono del terreno de juego, con la posibilidad de dar por perdido el partido al Adana Demirspor por 3-0 y sancionar al equipo con la pérdida de tres puntos.