El barco de Arce

El abogado y analista, Tomislav Viruez habló de la disparatada proclamación de Luis Arce para candidato a presidente como un gesto de desesperación por conservar el poco respeto que todavía le tienen en su entorno burocrático. Cree que semejante despropósito, es decir, lanzar una candidatura con apenas el dos por ciento de respaldo en las encuestas, es alentado por ministros y funcionarios que necesitan conservar sus puestos de trabajo para continuar generando ingresos, pues no saben trabajar y en este momento la “calle está dura” para todos. Según Viruez, el presidente que no se postula a la reelección pierde el respeto de sus colaboradores, que, guiados por su instinto de supervivencia, dedican su tiempo a apoyar a otro candidato que le brinde mejores expectativas. Lo que hace Arce, no sólo con su falsa candidatura, sino con su empecinamiento en mantener el modelo estatista, derrochador y “peguista”, es evitar que ocurra lo mismo que en el barco que se está hundiendo y provoca la huida de sus ocupantes, algunos muy pequeñitos y chillones… Aunque la verdad es que el gobierno no alberga ninguna otra variedad de huéspedes.