La mansión de Nicole Kidman y su esposo, Keith Urban fue robada el pasado 14 de febrero, luego de que los ladrones rompieran una puerta de vidrio para ingresar al inmueble.
Aunque los delincuentes se llevaron varios objetos, aún no se ha confirmado qué bienes fueron robados. El hecho ha puesto en alerta a las autoridades, que están investigando un aumento en los robos a viviendas de celebridades en California.
La Policía de Los Ángeles recibió una llamada de emergencia cerca de las 8 de la noche el viernes pasado y acudió de inmediato a la casa de la famosa pareja.
Afortunadamente, ni Kidman ni Urban se encontraban en la propiedad en el momento del asalto. Las autoridades indicaron que no hay indicios de que el robo haya sido dirigido específicamente a la familia, lo que sugiere que los asaltantes actuaron al azar.
Este incidente ocurre en el contexto de una creciente ola de robos en casas de alto perfil en California, que ha afectado a varias celebridades en los últimos meses.
En un hecho relacionado, la policía de Beverly Hills arrestó a tres sospechosos vinculados a una serie de asaltos a casas de lujo, tras una persecución que terminó en un choque cerca de Rodeo Drive en Los Ángeles, según NBC News.
