
El incremento salarial anunciado este lunes, por el Gobierno nacional generó fuertes cuestionamientos tanto en el sector empresarial y productivo, sumado a esa ola de críticas, desde el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), creen que la medida fue ‘impuesta’ y que golpea al sector empresarial privado.
“La sostenibilidad y la calidad de los empleos están en juego. Con esta determinación (incremento) vamos a tener efectos en cascada”, señaló el gerente general del IBCE, Gary Rodríguez, quien remarcó que así como hay una preocupación con el sector laboral, también tiene que haber una preocupación con el sector empresarial.
“No tenemos datos de la merma de empleo, pero hace 10 años se hablaba que la economía informal era de 60%, hoy se habla de un 80%, esto quiere decir que, lo que puede ser una fugaz alegría se transforma el día de mañana, en una tristeza prolongada”, recalcó.
Detalló que, cuando las empresas que están golpeadas por una crisis y están obligadas a cumplir con un nuevo incremento elevado, lo único que provocará es que disminuirán la cantidad de empleos en el sector formal.
“Van a disminuir la cantidad de empleos de calidad, la sostenibilidad de ese empleo hacia el futuro y con ello, habrá una mayor precarización del empleo, mayor informalidad de la economía y probablemente a raíz de eso mucha gente tenga que migrar del país para ir a subemplearse y trabajar incluso, en condiciones de semiesclavitud en el exterior”, advirtió.
Cuestionó al Gobierno por no escuchar la voz del sector privado y calificó que el empresariado fue sistemáticamente ignorado. Además, recordó que estas situaciones se han vivido durante los últimos 25 años en el país, con un incremento de 7 veces del salario mínimo nacional.
“De acuerdo a nuestra gerencia técnica, entre el año 2000 y 2024, ha habido un 600% de incremento en el salario nominal y quisiéramos decir que el esfuerzo en el sector privado ha sido acompañado con políticas desde el sector público, pero lamentablemente no es así”, dijo.
Añadió que con el tiempo suben los salarios en el sector formal, pero éste se hace cada vez más pequeño. ¿Por qué una vez más se ha escuchado solo a los trabajadores, se ignora a los empleadores cuando de éstos depende que los empleos continúen en el tiempo. (...) La pobreza no se soluciona con dádivas haciendo a alguien menos rico para tener una masa de menos pobre, la pobreza se soluciona cuando hay inversión, más producción, más exportación, sustitución de importaciones, con ello se generan empleos dignos, estables, sostenibles y previsibles en el tiempo”, acotó.
Prevé que el incremento anunciado por el Gobierno, de un 10% al Salario Mínimo Nacional (SMN) y hasta un 5% al haber básico, llevará a la informalidad a muchas empresas, la precarización del empleo y la pobreza puede aumentar. “La estabilidad, la sostenibilidad, la calidad del empleo tiene que ver con que a las empresas les vaya bien, pero lamentablemente se escucha a una sola parte, en este caso, solo a los trabajadores”, sostuvo Rodríguez.