Bajo el penoco

Razones suficientes

| 2025-05-13 00:10:00

Cuando un expresidente confiesa con cinismo que tomó 4.000 millones de dólares de los fondos de jubilación para construir un teleférico deficitario, cualquier discusión sobre las razones para desterrar al MAS del poder queda resuelta. Evo Morales no solo admite el uso arbitrario de los ahorros de los trabajadores, sino que minimiza el hecho, justificándolo como una inversión con "renta". ¿Renta para quién? El sistema Mi Teleférico hoy representa una pesada carga económica, lejos de ser autosostenible. El colmo de la desfachatez es que Evo, lejos de arrepentirse, utiliza el escándalo para señalar que Luis Arce está haciendo lo mismo, pero peor. ¿Ese es el legado que defienden? ¿Una competencia de saqueo entre caudillos? La verdad es cruda: si seguimos tolerando este modelo de abuso y desprecio por los bolivianos de a pie, no solo los jubilados actuales, sino las generaciones futuras, quedarán sin nada. Razones sobran para cerrar de una vez por todas este ciclo de corrupción disfrazada de revolución.