El Barcelona se ha hecho con los tres puntos ante el Athletic Club de Bilbao, en San Mamés, en la correspondiente a la 38ª y última jornada de Liga. Ambos equipos salían al terreno de juego con muchas novedades en sus onces. El feudo de "Los Leones" auguraba un encuentro festivo, ya que el Athletic ya tenía los deberes hechos y su capitán Oscar de Marcos encaraba su última cita en Bilbao con la camiseta rojiblanca. Los dos goles del máximo artillero del equipo culé, solo superado en la Liga por Mbappé, y el gol de Dani Omo, hicieron valer para retornar a Barcelona con una victoria en el bolsillo.
El Athletic jugará la temporada que viene en la Champions League y ha logrado llegar a las semifinales de la Europa League, y su afición se mostraba agradecida. La noche del domingo se tornaba muy especial en San Mamés, y no por la importancia del encuentro contra el Barça en cuanto a los objetivos deportivos de ninguno de los dos equipos, pues no había nada en juego. Oscar de Marcos, el capitán del Athletic, decía adiós a sus días como rojiblanco 15 años después. El lateral recibió un homenaje al principio del encuentro, con un pasillo de los jugadores del campeón de Liga.
El Barcelona venía de pinchar en caa ante el Villarreal, y pese a haber ganado ya la Liga, buscaba dejar una buena última imagen. Por su parte los vascos vencieron en su anterior choque en Mestalla y ya habían logrado su misión de clasificar a Champions.El Athletic comenzó avisando, con un gol que fue anulado por fuera de juego, pero fue el Barcelona el que golpeó primero con una vaselina de Lewandowski en el 14", aprovechando un error de la defensa bilbaína. Y solo tres minutos tardó el polaco en volver a castigar a Unai Simón con un remate de cabeza a la salida de un córner.
El intento de reacción
Los pupilos de Ernesto Valverde trataban de reaccionar con alguna acción ofensiva, protagonizada por Maroan, aunque sin encontrar el gol. De Marcos realizaba internadas por la banda como si de su primer día se tratase, con un ritmo y una energía que no parecen corresponder a sus 36 años, alentado por toda una afición entregada. El goleador del Barcelona comenzó a mostrar molestias en la zona cervical, en la espalda, pero todo parecía quedar en un susto. El delantero, ex del Barakaldo, perdonó en un mano a mano generado por un pase al espacio de De Marcos.
En la reanudación del descanso, Lewandowski perdonó su tercer gol, pero el Barça continuó manteniendo el esférico, tratando de generar acciones de peligro con el desequilibrio de Lamine Yamal. La volvió a tener el polaco en el 60", en otro mano a mano que salvó Yuri Berchiche con una entrada providencial. Ninguno de los dos equipos terminaba de hacerse con el cuero sobre el minuto 65 y las ocasiones continuaron sucediéndose para ambos sin encontrar el premio del gol, hasta que un penalti de Yuri sobre Dani Olmo en el 91" fue transformado por el propio centrocampista del Barça, llegando al final del partido con un 3-0. /ED
