
Con emoción a flor de piel y la voz entrecortada, Miguel Ángel Russo fue presentado oficialmente como nuevo director técnico de Boca Juniors, iniciando así su tercer ciclo al mando del equipo. A su lado, Juan Román Riquelme, presidente del club, lo acompañó brevemente en la conferencia de prensa antes de cederle el protagonismo.
Ambos vestidos de negro, Riquelme abrió el acto con palabras cargadas de afecto: “Cada vez que nos toca recibir a un jugador o un entrenador nos ponemos muy contentos. Hoy es un día especial: presentamos al último técnico que nos dio la Copa Libertadores. Es mi amigo y solo deseo que seas muy feliz. Te quiero, felicidades.”
Visiblemente conmovido, Russo agradeció el respaldo y expresó su felicidad por volver al club donde fue campeón continental en 2007: “Estoy muy contento. Sé lo que vamos a jugar y a competir. Es una alegría muy grande. Amo lo que hago y estoy muy bien acompañado por mi cuerpo técnico. En los últimos años logramos muchos campeonatos y seguimos buscando más. Sé lo que significa el mundo Boca, cómo manejarme y, sobre todo, sé lo que necesita el hincha.”
El entrenador de 69 años asume el cargo tras la salida de Fernando Gago y el breve interinato de Mariano Herrón, y lo hace con gran parte del equipo de trabajo que lo acompañó hasta hace pocos días en San Lorenzo.
Russo también aclaró que el contacto con la dirigencia xeneize se dio después de la eliminación del ‘Ciclón’ en semifinales del Torneo Apertura ante Platense, el pasado domingo. Sin embargo, la información sobre su inminente llegada ya había comenzado a circular horas antes, generando un fuerte impacto en Boedo.
Con experiencia, historia y un vínculo afectivo con el club, Russo vuelve a La Ribera con la misión de enderezar el rumbo futbolístico de Boca y devolverle protagonismo a nivel local e internacional.