Brasil intentará dar un paso firme rumbo al Mundial 2026 cuando reciba este martes a Paraguay, a las 20:45 (hora boliviana), en un duelo crucial de la fecha 17 de las Eliminatorias Sudamericanas. El compromiso será el segundo bajo el mando de Carlo Ancelotti, cuyo debut dejó dudas tras el empate sin goles ante Ecuador en Guayaquil.
La "verdeamarela" atraviesa un momento inusual de irregularidad. Con 22 puntos, producto de seis victorias, cuatro empates y cinco derrotas, ocupa el cuarto lugar en la tabla de la Conmebol, aferrada aún a los puestos de clasificación directa, pero sin margen de error. El 0-0 frente a Ecuador marcó su segundo partido consecutivo sin ganar, luego del duro revés ante Argentina (0-3) en el clásico sudamericano.
Ancelotti, fichado con gran expectativa tras su exitoso paso por el Real Madrid, aún no ha logrado imprimir su sello. En su estreno, figuras como Vinicius Jr. y el joven talento Estevão fueron neutralizados por una ordenada defensa ecuatoriana. El italiano, sin embargo, recupera para este partido a Raphinha, ausente en Guayaquil por suspensión y recientemente elegido como el mejor jugador de LaLiga.
Enfrente estará una Paraguay revitalizada, que llega con viento a favor. Desde la llegada del argentino Gustavo Alfaro, la ‘albirroja’ encadena nueve partidos invicta, con cinco victorias y cuatro empates, lo que la ha catapultado al tercer puesto, con 24 unidades, las mismas que Ecuador, aunque con mejor diferencia de goles.
Los guaraníes vienen de un golpe de autoridad: 2-0 ante Uruguay en Asunción. Un tanto tempranero de Matías Galarza y un penal convertido por Julio Enciso, la gran figura del equipo, sellaron una victoria que los consolida como serios aspirantes a un boleto directo a Norteamérica 2026.
El contraste es evidente. Mientras Paraguay ha encontrado solidez bajo el nuevo ciclo de Alfaro, Brasil sigue en búsqueda de una identidad colectiva. Tres entrenadores han pasado por el banco brasileño desde el inicio del proceso clasificatorio, una inestabilidad impensada en otras épocas.
La presión crece sobre la selección brasileña, no solo por su presente, sino por el empuje de otros equipos. Venezuela, con 18 puntos, acecha desde la zona de repechaje y podría acortar distancias si Brasil tropieza de nuevo.
Este martes, en el Arena Corinthians de São Paulo, Brasil está obligado a ganar. Para Ancelotti y sus dirigidos, no hay margen para más empates ni experimentos: la clasificación al Mundial está en juego, y los márgenes se achican.
