Respira Italia. Tras un arranque titubeante en las Eliminatorias europeas rumbo al Mundial 2026, la Azzurra consiguió este lunes su primer triunfo al vencer 2-0 a Moldavia en Reggio Emilia, por la cuarta fecha del Grupo I. El resultado no solo aliviana la tensión tras la goleada sufrida ante Noruega, sino que ofrece un respiro en medio del clima enrarecido que atraviesa el combinado tetracampeón del mundo.
El encuentro marcó también la despedida de Luciano Spalletti, quien dejará el cargo tras este partido, condicionado por la dura derrota 0-3 sufrida ante los noruegos. La selección italiana, aún lejos de su mejor forma, mostró señales de mejoría y compromiso, ante una Moldavia combativa pero sin puntería.
El inicio del duelo fue complejo para los locales. Moldavia sorprendió con intensidad y estuvo cerca de dar el golpe temprano: Ion Nicolaescu marcó de cabeza a los nueve minutos tras un centro preciso de Oleg Reabciuk, pero el gol fue anulado por posición adelantada luego de la revisión del VAR. Italia respondió con empuje y un remate peligroso de Mateo Retegui, figura ofensiva pese a no convertir.
La apertura del marcador llegó a los 40 minutos, tras una buena jugada colectiva. Giacomo Raspadori recibió un centro desde la derecha y, con un derechazo bajo cruzado, venció al arquero Cristian Avram para poner el 1-0. Antes del descanso, Moldavia volvió a inquietar, dejando claro que no estaba dispuesta a ceder fácilmente.
Ya en el complemento, Italia golpeó en el momento justo. A los 50 minutos, Andrea Cambiaso aprovechó un rebote en el área tras un nuevo centro desde la derecha y colocó el 2-0 con un remate bajo. El tanto terminó de inclinar la balanza a favor de los locales, que manejaron el ritmo del partido y estuvieron cerca del tercero en un cabezazo de Lorenzo Lucca en tiempo añadido.
Pese a que el marcador no refleja una superioridad aplastante, Italia mostró una versión más sólida y efectiva. La victoria le permite sumar sus primeros tres puntos en estas eliminatorias, tras haber disputado solo dos partidos (con un juego pendiente), y mantener vivas sus aspiraciones de clasificación directa en un grupo que lidera Noruega.
Por su parte, Moldavia sigue sin sumar unidades. El equipo dirigido por Serghei Cleșcenco acumula tres derrotas consecutivas (ante Estonia, Noruega e Italia) y se hunde en el fondo de la tabla, cada vez más lejos del sueño mundialista.
