“El mundo está comenzando a mirar hacia Bolivia con otros ojos”, destaca Mónica Marchett, líder del Grupo Mónica, a la que pertenece la Cabaña Mónica, que ha sido parte de un hito con la venta de una vaca boliviana por $us 1,.5 millones en Brasil.
La ejecutiva de origen brasileño, con más de 38 años de trayectoria en el Grupo Mónica, resalta en esta entrevista el avance de la genética boliviana, ya que no tiene nada que envidiar a la de países vecinos como Paraguay, Brasil o Argentina.
Marchet destaca que en Bolivia hay talento, pero se necesita un entorno adecuado y ajuste en las normativas para seguir creciendo y consolidarse como un referente en la región.
¿Cuál es el rol de cabaña Mónica en la venta récord de una vaca boliviana en $us 1,5 millones?
Como Cabaña Mónica, tuvimos el privilegio de formar parte activa de este hito histórico para la ganadería boliviana. Junto a Cabaña Santiago, adquirimos a Dheli FIV hace unos tres años con la visión clara de potenciar su desarrollo genético y mostrar al mundo el nivel que ya está alcanzando Bolivia. Esta venta por 1,5 millones de dólares en Brasil no solo es un reconocimiento al animal, sino al trabajo sostenido de años que venimos realizando con pasión, disciplina y visión de largo plazo. Para nosotros, es un antes y un después.
Si bien la exportación de genética boliviana aún es incipiente. ¿Esta operación muestra que Bolivia tiene mayor potencial?
Sin duda. Esta operación no solo refleja el potencial, sino que confirma que estamos listos para competir al más alto nivel. El mundo está comenzando a mirar hacia Bolivia con otros ojos. La genética bovina nacional tiene calidad, tiene respaldo técnico y tiene empresas comprometidas que están invirtiendo seriamente en innovación. Este resultado marca un camino para abrir mercados y demuestra que, cuando el país apuesta por la excelencia, los resultados llegan.
¿Cuánto ha mejorado la genética boliviana y cómo está en comparación a los países de la región?
La genética boliviana ha evolucionado de manera extraordinaria. Hoy podemos decir con orgullo que los animales que producimos en Bolivia no tienen nada que envidiar a los de Brasil, Argentina o Paraguay. Hemos invertido fuertemente en tecnología, en capacitación, en biotecnología y sobre todo en un trabajo ético, profesional y constante. Prueba de ello es que ejemplares bolivianos como Dheli FIV están siendo valorados a nivel internacional y comienzan a exportarse.
¿Qué proyectos o perspectivas tiene el grupo Mónica en materia de mejoramiento genético y de la pecuaria en general?
Nuestro compromiso con el desarrollo agropecuario es integral. En genética seguimos apostando a la excelencia, a través de programas de mejoramiento con biotecnología de punta. A la par, acabamos de inaugurar la fábrica biológica más moderna de Bolivia, para aportar insumos sostenibles y de alta calidad al sector agrícola. Celebramos más de 30 años de trayectoria reafirmando una visión: trabajar por una Bolivia más productiva, más eficiente y conectada con el mundo.
¿Qué temas o factores se deberían adecuar o mejorar en cuánto a las normas para facilitar el desarrollo de la genética boliviana?
Es clave avanzar en la homologación de normas sanitarias con países importadores, para que nuestros productos genéticos tengan un acceso más ágil a nuevos mercados. También necesitamos simplificar procesos administrativos, modernizar algunos marcos normativos y, sobre todo, fomentar espacios de diálogo público-privado. Bolivia ya tiene el talento, ahora necesita el entorno adecuado para seguir creciendo y consolidarse como referente en la región.
Puede contarnos la trayectoria de Cabaña Mónica
Cabaña Mónica nace como parte del Grupo Mónica, una empresa familiar que hace más de 30 años decidió apostar por el agro como motor de desarrollo. Desde nuestros inicios, tuvimos claro que queríamos marcar la diferencia: con genética de alta calidad, con participación activa en exposiciones, y con una visión de largo plazo. Hoy, somos reconocidos como una de las cabañas líderes en la producción de ganado Nelore de élite, y estamos más comprometidos que nunca con seguir llevando a Bolivia al siguiente nivel.
