Jesús les dijo: «Los reyes de las naciones dominan sobre ellas, y los que ejercen el poder sobre el pueblo se hacen llamar bienhechores. Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, el que es más grande, que se comporte como el menor, y el que gobierna, como un servidor».
(Lucas 22,25-26)
Faltando poco para entregar las llaves del poder, el Gobierno del Movimiento al Socialismo está empeñado en gastar los pocos quintos que quedan en las arcas del Estado —propiedad del Pueblo— en propaganda de auto alabanza exactamente como observó Jesús en la Última Cena.
La realidad, por supuesto, es otra, y por esto tenemos que agradecerle al presidente economicista por haber acelerado la caída del MAS en sus diversos partidos para que otros menos ineptos tengan la oportunidad de levantar al país. Sin embargo, no estoy de acuerdo con quienes califican a Bolivia como un Estado fallido.
Haití es un Estado fallido donde la población soporta una inseguridad total. Desde que asesinaron a su presidente en el 2021, pandillas armadas disputan territorios urbanos cometiendo masacres en la capital Port-au-Prince. No saldrá de su colapso total sin la intervención de la ONU y mucha ayuda económica extranjera.
Bolivia, en cambio, es un país viable, fuerte y resistente. No es un país fallido. Es pluridisfuncional. En el lenguaje socialista, hemos soportado un gobierno “con capacidades diferentes”.
Por ejemplo, en el 2016 fue capaz de reprimir con gases lacrimógenos a personas con discapacidad en sillas de ruedas en la Plaza Murillo porque adoptaron la mentalidad socialista de pedir un bono en vez de superar sus limitaciones. ¿Qué habría hecho si estos hubieran utilizado cartuchos de dinamita como suelen tirar los manifestantes masistas?
“Personas con capacidades diferentes” es un eufemismo tonto porque todos tenemos capacidades diferentes. “Minusválido” es un término “inválido” porque todas las personas tenemos valor y dignidad. Todos merecemos un trato igual y respetuoso, especialmente ante la ley. Pero es evidente que nuestras capacidades y nuestras necesidades son diferentes, y exigen respuestas apropiadas. Las personas con una u otra discapacidad nos enseñan que la DIScapacidad no es INcapacidad. Más que bonos, las personas con discapacidad necesitan capacitación, para no quedarse en la dependencia parasitológica.
Si mi discapacidad me paraliza, la tecnología me puede dar movilidad, y quizás puedo hacer mucho bien con mi cerebro. Y si tengo el Síndrome de Downs, puedo abrazar a los demás con inteligencia emocional. Algunas personas, quizás, al sufrir múltiples discapacidades, ofrecen a los demás la oportunidad de desarrollar su capacidad para la solidaridad y la cercanía humana, aprendiendo la Inteligencia Espiritual, cuya falta es la mayor discapacidad que afecta a toda la humanidad.
En uno de los debates presidenciales el candidato evista defendió las manifestaciones violentas de Sacaba y Senkata como derecho a la protesta, pero como el resto del MAS con sus capacidades diferentes se olvidó de Chaparina y la represión de la pacífica VIII Marcha de los Indígenas del Oriente, cuando madres, ancianos, adultos, jóvenes y niños fueron reprimidos violentamente y después secuestrados. De hecho, han sido capaces de hacer caso omiso a todos los reclamos de los indígenas del Oriente, mientras apoyaron el avasallamiento sistemático de sus territorios, la quema de sus bosques y la contaminación de sus ríos, todo en nombre de la interculturalidad.
Han desarrollado muchas capacidades diferentes en nuestro Estado Pluridisfuncional:
● No funciona la Justicia sino el Estado Policial y la persecución política.
● No funcionan los Derechos Humanos sino su usurpación.
● No funciona la Educación sino el lavado de cerebros.
● No funciona la Salud sino los paros cardíacos de Salud.
● No funciona la Propiedad Productiva sino su avasallamiento.
● No funcionan las Áreas Protegidas sino su quema.
● No funciona el Libre Tránsito sino el bloqueo de caminos.
● No funciona la Industrialización sino empresas estatales deficitarias
● No funciona la minería sino el extractivismo y la contaminación con mercurio.
● No funciona el YPFB sino las colas para gasolina y diésel.
● No funciona la Economía sino el despilfarro del Estado.
● No funciona el Modelo Socialista y su proceso de cambio, es Pluridisfuncional.
“Cuando Juan Bautista fue informado sobre Jesús, mandó preguntarle para estar seguro: «¿Eres tú el que ha de venir o debemos esperar a otro?» … Entonces Jesús respondió a los enviados: «Vayan a contar a Juan lo que han visto y oído: los ciegos ven, los paralíticos caminan, los leprosos son purificados y los sordos oyen, los muertos resucitan, la Buena Noticia es anunciada a los pobres. ¡Y feliz aquel para quien yo no sea motivo de tropiezo!» (Lc 7,18-19.22-23).
Lamentablemente, para los socialistas, con sus capacidades diferentes, Jesús y la Iglesia son motivos de tropiezo. Anticolonialismo, pues, es código por anticristiano. Anti patriarcalismo equivale a anti Iglesia. Destruye a su vez a la familia para que sea disfuncional también.
Por esto necesitamos acabar con el proceso de cambio fallido e instalar un verdadero cambio de proceso que funciona. Esto no es una teocracia, la peor de las dictaduras, sino una auténtica democracia, con separación de los poderes, instituciones fuertes, y libertad económica.
Sin embargo, desconfío de la combinación de las palabras “cristiano” con “demócrata” en la política. Prefiero que lo cristiano esté en el compromiso personal y en la adhesión eclesial, para que cuando aquel gobierno que se identifica como cristiano inevitablemente comete injusticias, no ensucie el nombre de Cristo, además tiene sabor a manipular el sentimiento religioso. Los cristianos debemos profundizar la Doctrina Social de la Iglesia que nos enseña a tomar parte activa en la tarea noble de la política, pero no por esto formar un partido o gobierno expresamente cristiano o católico. Basta que seamos personas abiertas, honestas, serviciales, humildes y de buena voluntad en todo lo que hacemos.
Hace falta en Bolivia gobernantes sin parálisis cerebral ideológico que sean capaces de escuchar a la Iglesia y comprender la sabiduría que conlleva. Así pasaremos de lo pluridisfuncional a lo que sucedió con Jesús: “En el colmo de la admiración, decían: «Todo lo hace bien: hace oír a los sordos y hablar a los mudos».” (Mc 7,36-37).
Dios te bendiga.