Terence Crawford venció este sábado por la noche a Saúl “Canelo” Álvarez en Las Vegas y se consagró como nuevo campeón unificado de los supermedianos, al quedarse con los cinturones del CMB, AMB, FIB y OMB. Desde el momento en que el juez levantó su mano, el estadounidense quedó oficialmente como el monarca absoluto de la categoría.
Sin embargo, la sorpresa llegó en la rueda de prensa posterior, cuando Crawford decidió devolverle los cinturones a Álvarez. La escena se viralizó rápidamente en redes sociales y generó confusión entre los aficionados.
La explicación es sencilla: en el boxeo profesional, los organismos entregan a cada campeón sus propios cinturones, por lo que Crawford recibirá los suyos en los próximos días. El gesto, más allá del protocolo, fue una clara muestra de respeto hacia el pugilista mexicano, con quien compartió un momento de fair play tras la batalla en el ring.
De esta manera, ambos dejaron en claro que las rivalidades terminan al sonar la campana final, dando una lección de deportividad al mundo.
Pese a la derrota, Canelo sigue siendo una de las grandes figuras del boxeo y se espera que en 2026 defina su futuro con un nuevo reto. Arabia Saudita, convertida en epicentro del boxeo mundial, aparece como el escenario ideal para un eventual combate frente a David Benavídez, un duelo largamente esperado por los aficionados.
