El Napoli volvió a sonreír. Tras una semana convulsionada, el conjunto de Antonio Conte se impuso 3-1 al Inter de Milán y recuperó el liderato de la Serie A, en el partido más destacado de la octava jornada del fútbol italiano.
El equipo napolitano, que venía de una dura derrota 6-2 ante el PSV Eindhoven por Champions y de dos caídas en sus tres últimos duelos ligueros, reaccionó con carácter ante su público en el estadio Diego Armando Maradona. Y lo hizo frente a un rival que acumulaba siete triunfos consecutivos entre todas las competiciones.
El encuentro también tuvo tensión en los banquillos: Conte protagonizó un cruce gestual y verbal con Lautaro Martínez, su exdirigido en el Inter, reflejo de la intensidad con la que se vivió el duelo.
Kevin De Bruyne abrió el marcador desde el punto penal (33"), aunque el belga se lesionó en el muslo derecho en la misma acción y tuvo que abandonar el campo ayudado por el cuerpo médico. Scott McTominay amplió la ventaja con una soberbia media volea (54"), y André-Frank Zambo Anguissa (66") selló el triunfo tras una brillante jugada individual.
El Inter, que sigue sin contar con Marcus Thuram por lesión, descontó por medio de Hakan Çalhanoglu (59", de penal), pero no logró evitar la derrota pese a estrellar dos balones en el palo y mostrar una inusual fragilidad defensiva.
“Nos enfrentamos al equipo más fuerte de Italia y realizamos un gran partido pese a las ausencias”, declaró Conte tras el encuentro. No obstante, la preocupación en el Napoli pasa por el estado físico de De Bruyne, quien presenció el final del partido en muletas y aún espera diagnóstico médico.
Con esta victoria, el Napoli suma 18 puntos y supera por uno al AC Milan, que empató en casa ante el Pisa. El Inter cae al cuarto lugar con 15 unidades, las mismas que la Roma, que podría alcanzar la cima si vence este domingo al Sassuolo.
/El Día - AFP
