
El Barça recibía a Osasuna en lo que suponía el último partido de los blaugranas en casa en este año 2025. Unas 42.000 personas se dieron cita en un Spotify Camp Nou que tuvo exhibición lumínica en la previa. El partido parecía propicio y cómodo para sacar los tres puntos adelante por la buena dinámica de la tropa de Hansi Flick. Nada más lejos de la realidad. Osasuna vendió cara la derrota con un planteamiento muy estudiado por parte de Alessio Lisci.
El primer acto arrancó con un posible penalti sobre Marcus Rashford que el colegiado Adrián Cordero Vega no estimó. El Barça llevaba el control y la manija del juego abrazándose a un Pedri que gravitaba el juego culé. Osasuna por su parte buscaba las contras por medio de un Víctor Muñoz chispeante y eléctrico. El Barça se adelantó mediada la primera parte con un gol de Ferran Torres, sin embargo el VAR invalidó el tanto por un fuera de juego en el origen del saque de esquina. Al descanso se llegó con 0-0 y con un Osasuna que se mostraba sólido con un 5-4-1 que imposibilitaba a los culés hallar fluidez y el camino del gol.
La segunda parte inició agitada con ocasiones en ambas porterías. Sergio Herrera detuvo un libre directo de un incisivo Marcus Rashford en el 47′ y Victor Muñoz tuvo cerca el gol rojillo en el 49′. En el 51′ una buena internada de un profundo Jules Koundé casi le permite a Rashford abrir el marcador. Sobre la hora de partido Alessio Lisci hizo cambios en la vanguardia navarra, dando entrada a Raúl García, Rubén García y Sheraldo Becker para suplir a Ante Budimir, Aimar Oroz y un Victor Muñoz que no paró de generar peligro.
En el minuto 70 apareció Raphinha de un modo letal y quirúrgico. Eric García da salida limpia a un balón para Pedri, que recoge un balón a 60 metros, conduce con determinación, divide a la zaga navarra, asiste al corcel brasileño -jugando por dentro hoy- y este lanza un potente chut desde la frontal del área que bate a Sergio Herrera. El muro navarro caía tras 70 minutos de gran resistencia.
Con lo más difícil ya hecho, Hansi Flick movió piezas en el minuto 75 dando entrada a Frenkie de Jong y Fermín López por Marcus Rashford y Pau Cubarsí. Un Eric García colosal volvía así a la posición de central tras firmar una exhibición en el mediocentro posicional.
En el minuto 86′ el propio Raphinha firmaría su segundo gol tras aprovechar un mal despeje de la zaga rojilla a un centro de Jules Koundé. 2-0, ovación cerrada para Pedri tras ser sustituido y partido cerrado para los de Hansi Flick. Una victoria sufrida, trabajada y que permite a los blaugranas ver el Alavés vs Real Madrid de mañana desde la tranquilidad que da el liderato. Ya se sabe, ‘la tranquilidad es lo que más se busca’.