
Al superar el umbral de los tres dígitos en su fortuna, Beyoncé ingresó a un grupo selecto de apenas 22 celebridades en la lista de multimillonarios identificadas por Forbes, de las cuales casi la mitad alcanzaron esa categoría en los últimos tres años.
Junto a su esposo, Jay-Z, Taylor Swift, Bruce Springsteen y Rihanna, Beyoncé figura ahora entre las cinco figuras de la música que cruzaron esa barrera económica.
El ascenso de Queen Bey hacia la cima financiera avanzó de manera gradual y constante, consolidándose especialmente a partir de 2010, cuando tomó el control total de su carrera al fundar Parkwood Entertainment.
Esta empresa administra cada aspecto de su trayectoria, desde la producción musical y audiovisual hasta la coordinación de giras, asumiendo los costos iniciales para maximizar los ingresos posteriores.
“Sentí que quería seguir los pasos de Madonna y ser una potencia, tener mi propio imperio y mostrar a otras mujeres que cuando llegas a este punto no tienes que firmar con nadie más ni compartir tu dinero y tu éxito: lo haces tú misma”, dijo a Forbes en 2013 sobre su decisión de autogestionarse.