Los Institutos CATO y FRASER acaban de publicar su prestigioso INDICE MUNDIAL DE LA LIBERTAD HUMANA 2025 (HFI). Presenta el estado de la libertad humana en el mundo basándose la libertad personal, civil y económica. La libertad humana es un concepto social que reconoce la dignidad de las personas y se define como libertad negativa o ausencia de restricciones coercitivas. Se elabora desde el 2000 y se trata del más completo creado hasta la fecha para un conjunto de países y jurisdicciones de importancia mundial, que representan el 98% de su población. Abarca 165 jurisdicciones para 2023, el año más reciente para el que se dispone de datos suficientes.
Las áreas medidas son: Estado de derecho; Seguridad y protección; Movilidad; Religión; Asociación, reunión y sociedad civil; Expresión e información; Relaciones; Tamaño del gobierno; Sistema legal y derechos de propiedad; Moneda sólida; Libertad para comerciar internacionalmente y Regulación.
Los países que ocuparon los 3 primeros puestos fueron Suiza (9.15), Dinamarca (9.03), Nueva Zelanda (9.02) y los peores son 163. Yemen (3.98); 164. Irán (3.78) y 165. Siria (3.27). En América, los peores puestos los ocupan -como de costumbre- Venezuela 159; Nicaragua 153 y Haití 120. Los mejores rankeados son Canada 12; EEUU de Norteamérica 15 y Chile 25.
Bolivia ocupó el puesto 87/165 logrando entre otros aspectos: 7.35 en libertad personal; 6.05 en libertad económica y 6.81 en libertad humana. Bajó 3 puestos respecto de la anterior calificación 2022/2023 aunque subió 0.10 respecto de aquel dato. En América y el Caribe, ocupó el puesto 22 de 26 países, sólo por encima de México y los 3 coleros antes mencionados. Llama la atención el significativo deterioro sufrido desde el año 2000 -cuando empieza la medición- habiendo caído desde ese momento 38 puestos y 0,77 puntos.
En esta edición, la peor puntuación lograda por Bolivia es en estado de Derecho 2.8 y la mejor en moneda sólida (¿?) con 9.3; pasando por Seguridad y protección 8.8; Religión 8.4; Expresión e información 7.3; Relaciones 8.8; Tamaño del gobierno 5.9; Sistema Legal y Derechos de propiedad 4.1.; Regulación 4.4.; Libertad para comerciar internacionalmente 6.5. Adviértase pues seguro le habrá llamado la atención, que esos datos corresponden al 2024.
En términos generales, el HFI concluye que existe una fuerte relación entre la libertad y la renta per cápita media. Las jurisdicciones que se encuentran en el cuartil superior de libertad disfrutan de una renta per cápita media significativamente más alta (53.635 dólares) que las de otros cuartiles; la renta per cápita media en el cuartil menos libre es de 14.201 dólares. También encuentra una fuerte relación positiva entre la libertad humana, la democracia y una serie de indicadores de bienestar humano, entre los que se incluyen la tolerancia, las donaciones benéficas, la esperanza de vida y la salud medioambiental, entre otras.
Las conclusiones del HFI sugieren que la libertad desempeña un papel importante en el bienestar humano y ofrecen oportunidades para seguir investigando las complejas formas en que la libertad influye y puede verse influida por los regímenes políticos, el desarrollo económico y toda la gama de indicadores del bienestar humano.
Nuestro país acaba de empezar el difícil tránsito entre el régimen, para los más optimistas, híbrido que supuso el MASismo entre todas sus vertientes (totalitario para mi gusto) y habrá que ver como quedaremos en futuros rankings, fruto de las ojalá medidas exitosas que se están implementando y que podrían dar algunas mejoras en el inmediato futuro.
Con todo, el HFI nos prueba nuevamente más allá de toda duda razonable por si cabrían dudas, la suprema importancia de la libertad en todas sus expresiones (humana, económica y personal) para construir bienestar humano. Prueba de ello es que los peores lugares los ocupan las dictaduras nicaragüense y venezolana (la Cubana ni aparece pues no tiene siquiera datos confiables al igual que Corea del Norte); es decir aquellas ideologías trasnochadas como las afines a las que nos gobernaron en los últimos tiempos, so lindos pretextos como la supuesta defensa de los pobres, del estado u otras estrategias envolventes para justificar sus desvaríos para precisamente controlar y destruir esas libertades, terminaron por causar el desastre del que ojalá estemos ciertamente empezando a librarnos, al costo por todos conocido. "Algo bueno debe tener la libertad que todos los políticos siempre la alaban; pero no debe ser tan fácil la libertad que ya cuando llega el momento que están en el poder, la atacan a la primera oportunidad". Sergio SARMIENTO