Radiografía del comercio ilegal, aves amenazadas presentan una segunda oportunidad

Luego de conmemorarse el día mundial de la naturaleza

| | 2019-03-10
En la naturaleza está la preservación del mundo”, dijo Henry David Thoreau, un poeta y filósofo estadounidense. En tiempos donde la deforestación de bosques enteros y la caza indiscriminada están a la orden del día, es correcto comenzar con esa cita. En la última década, el tráfico ilegal de animales silvestres ha adquirido dimensiones considerables. Y es que los traficantes han visto brillar una luz al fondo del túnel: sacar provecho de aquellos seres que no pueden hablar. En esta edición, abordaremos las consecuencias que tienen este tipo de acciones en la biodiversidad de Sudamérica y Bolivia, centrando la atención en un grupo verdaderamente importante: las aves. 
 
Números altos en el comercio ilegal. Según los datos que se manejan en el Libro Rojo de la Fauna Silvestre de Vertebrados de Bolivia, a nivel global existen 9.856 especies de aves. De ellas, 1.415 están registradas actualmente en el país. A nivel departamental, la mayor riqueza de especies de aves se encuentra en La Paz  con 1.112, Santa Cruz con 1.078 y Cochabamba con 932. 
 
Alrededor de 22 mil loros son descubiertos cada año en mercados populares de Santa Cruz de la Sierra. De ellos, el 94% han sido capturados de forma ilegal y traficados de la misma manera, según la documentación presentada por la organización Birdlife Internacional.
 
Es por ello que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) afirma que el impacto del comercio ilegal y del tráfico de especies ha sido devastador en la biodiversidad de Sudamérica. Es más, se calcula que 737 especies de aves tienen algún grado de vulnerabilidad. De ellas, 441 figuran en Peligro Crítico, Peligro y Vulnerable, y dos ya se encuentran extintas.
 
En territorio boliviano, tres especies de aves están en peligro crítico de extinción. Una de ellas, la Paraba Barba Azul (Ara glaucogularis) cuenta con no más de 300 individuos en vida silvestre.
 
Protegidas en acuerdos nacionales e internacionales. En Bolivia, la Ley 584 declara a la Paraba Barba Azul como Patrimonio Natural del Estado Plurinacional de Bolivia. A su vez, se expresa priorizar la protección y conservación de la especie y su hábitat a través de planes, programas y proyectos a corto, mediano y largo plazo.
 
Por su parte, en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES), el comercio internacional de aves en peligro fue declarado ilegal. Esto, como resultado de los numerosos casos de tráfico silvestre registrados hasta el momento. En Perú, por ejemplo, entre los años 2000 y 2016, las aves silvestres fueron los animales más decomisados en su territorio. De los 66 mil individuos rescatados durante ese periodo de tiempo, 28 mil fueron aves.
 
Cómo operan los traficantes en territorio boliviano.  El Director Ejecutivo de la Asociación Civil Armonía, Rodrigo Soria Auza, explica que de acuerdo a las evaluaciones que realizó la organización a la especie Ara rubrogenys o Paraba Frente Roja, dedujeron que el área donde existe más tráfico de esta especie es en la Cuenca del Caine. 
 
“Salen por Toro Toro hacia Cochabamba. Los traficantes van de pueblo en pueblo buscando personas que quieran robar a las parabas y pichones de sus nidos. Estas personas mantienen al espécimen en cautiverio hasta que el traficante vuelva, pague y se lleve a las parabas. Hoy en día hay mucho menos tráfico, pero no significa que ya no exista. El hecho de que hayan anuncios esporádicos quiere decir que hay personas dedicadas a ello”, expuso Soria.
 
Acciones llevadas a cabo en el país. Las distintas entidades públicas, gubernamentales y no gubernamentales trabajan entre sí para disminuir las cifras del tráfico ilegal de animales silvestres. Ese es el caso de la Policía Forestal y Preservación de Medio Ambiente (POFOMA), quienes hasta el primer semestre del año 2018 habían realizado 970 operativos, cuyo resultado fue el rescate de 650 animales entre los que se encontraban monos, venados, tortugas, tucanes, serpientes, parabas y loros. 
 
Asimismo, Raúl Rojas, Coordinador de Biodiversidad de la Secretaría de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente de la Gobernación, señaló que hasta la fecha se habían rescatado 67 animales. “Durante la gestión 2018 se rescató un total de 861 individuos. Hasta el momento hay 5 personas detenidas, dos de ellas con sentencia por el caso de los colmillos de jaguar”, comentó.
 
Añade que para disminuir el tráfico de especies se llevan adelante acciones preventivas como la notificación a través de comunicados a empresas de transporte, friales, curtiembres y empresas de artesanías, respecto a la compra y venta de animales silvestres. “También se hacen controles en rutas interdepartamentales e interprovinciales. Además, se realizan inspecciones periódicas en centros de abastecimiento y se realiza una gran cantidad de actividades de educación ambiental principalmente con estudiantes y maestros de escuelas y universidades”, dio a conocer Rojas.
 
Por otra parte, la Asociación Civil Armonía, una organización dedicada a la conservación de las aves de Bolivia, tiene numerosos programas cuyos resultados han sido exitosos en la conservación de las dos especies de aves en estado crítico de extinción en el país. “Cuando Armonía empieza a trabajar con esta especie (Paraba Barba Azul), no se sabía prácticamente nada. El trabajo de la asociación logró disminuir el tráfico e identificar los sitios más importantes para la conservación de esta especie. Además, consolidamos áreas protegidas privadas como la Reserva Natural Barba Azul y la Reserva Natural Paraba Frente Roja”, cuenta el Director Ejecutivo de la entidad.
 
Este año la organización espera llegar a los 100 polluelos Barba Azul nacidos en “cajas nido”, un proyecto que consiste en la instalación de cajas artificiales de cría para la especie. 
 
737 Especies de aves 
en Sudamérica tienen algún grado de vulnerabilidad. 
 

22 Mil 
loros son descubiertos cada año en mercados populares de Santa Cruz de la Sierra. 

"Los traficantes van de pueblo en pueblo buscando personas que quieran robar parabas y pichones de sus nidos.  Mantienen a la especie en cautiverio hasta que el traficante vuelva y pague".

Rodrigo Soria Auza
Director ejecutivo de la Asociación Civil Armonía


Avistamiento de aves: una actividad rentable

Una reciente investigación realizada por la organización Conservation Strategy Fund (CSF), en colaboración con la National Audubon Society y la Universidad de los Andes de Colombia, confirmó el gran potencial que tiene Colombia para el avistamiento de aves y, por lo tanto, para desarrollar una interesante propuesta turística.

Con una muestra de 5.000 encuestados de Estados Unidos y Canadá, miembros de la organización Audubon, institución especializada en la conservación de aves y restauración de ecosistemas, demostraron que el turismo de observación de aves podría ser una de las actividades más rentables y con mayores beneficios económicos para las comunidades locales y para el país.

Jorge Maldonado, investigador y profesor de economía de la Universidad de los Andes,  explicó cómo “la demanda proyectada para el sector del aviturismo en Colombia estima, según el estudio, que un total de 280 000 personas solo en Estados Unidos y Canadá, miembros  de la  sociedad Audubon, estarían interesadas en visitar el país. Eso se traduce en que 15.000 personas al año estarían gastando cerca de 46 millones de dólares anuales en el proceso y eso implica 9 o 10 millones de dólares de ganancias para el país por esa actividad.”

Colombia alberga un aproximado de 1900 especies de aves en su territorio. Bolivia, por su parte, supera las 1.400.