Táctica venezolana

Es cada vez más evidente que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) está jugando a favor de Luis Arce, quien ya tiene el cartón lleno, pues hace mucho que maneja a su antojo la justicia y el congreso (que está prácticamente clausurado). El TSE hizo una rabieta, pero al final aceptó supervisar el congreso paralelo del MAS el pasado domingo en El Alto, donde se conformó una directiva que se atribuye la oficialidad por encima del MAS que controla el cocalero, cuya directiva fue anulada por… usted ya sabe. Es más, el mismo organismo incurre en una paradoja, pues por un lado veta las reuniones del cocalero y por otro lado le impone al MAS (el de Morales) una amonestación grave por haber incumplido la instructiva para convocar a un congreso (en los términos que indica el TSE) para la renovación de la directiva. De acumularse tres de esos llamados de atención, se corre el riesgo de eliminar la sigla del MAS. Justamente de eso es lo que se ha venido hablando en estos días, una estrategia que podría dejar el camino libre para aplicar la táctica venezolana, consistente en bloquear la inscripción a los opositores.