En un contexto en el que la salud sexual de los jóvenes europeos enfrenta nuevos desafíos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido una advertencia preocupante: el uso de condones entre adolescentes ha disminuido drásticamente, lo que podría desencadenar graves consecuencias sanitarias y sociales. Este descenso, según los expertos, es un fenómeno “alarmante” que amenaza con aumentar las tasas de infecciones de transmisión sexual (ITS) y los embarazos no deseados, al tiempo que incrementa los costos de atención médica en todo el continente.
Un informe reciente de la OMS reveló que casi un tercio de los jóvenes de 15 años reportaron no haber utilizado ni preservativo ni anticonceptivos la última vez que tuvieron relaciones sexuales. Más preocupante aún, aquellos que sí usaron algún método anticonceptivo, optaron con mayor frecuencia por la píldora en lugar del condón, reduciendo así la protección contra las ITS. Este fenómeno afecta de manera particular a los adolescentes provenientes de familias con bajos ingresos, quienes tienen más probabilidades de no utilizar ninguna forma de protección.
Este estudio también evidenció disparidades en el uso de condones entre chicos y chicas, así como entre diferentes países europeos. Por ejemplo, entre las chicas es más baja esa utilización en Albania, con solo un 24%, mientras que en Serbia alcanza el 81%. En cuanto a los chicos, Suecia registra el uso más bajo, con un 43%, y Suiza el más alto, con un 77%.
Estas cifras ponen de manifiesto una preocupante tendencia que, según los expertos, parece ser un problema generalizado en Europa. Esta situación expone a un número considerable de jóvenes a un riesgo significativo de contraer ITS y enfrentar embarazos no deseados. Según contó a New York Post, el Dr. Hans Henri P. Kluge, director regional de la OMS para Europa, la disminución en el uso de condones no es sorprendente dado que, en muchos países, la educación sexual adecuada sigue siendo insuficiente o está cada vez más bajo ataque.
La OMS ha señalado la necesidad urgente de tomar medidas inmediatas y sostenidas para detener esta cascada de resultados negativos, incluyendo un probable aumento en las tasas de ITS, mayores costos en el sistema de salud, y caminos educativos y laborales interrumpidos para los jóvenes que no reciben la información y el apoyo necesario a tiempo. La organización insta a los gobiernos, autoridades sanitarias y educativas, y otros actores esenciales a reconocer las causas fundamentales de esta situación y a actuar para corregirla.
Otro aspecto relevante que contribuye a la disminución del uso de condones es el creciente rechazo hacia los métodos anticonceptivos hormonales, especialmente entre las mujeres jóvenes. Según la revista Vice, la influencia de las redes sociales y las historias compartidas en plataformas como TikTok han generado preocupaciones sobre los efectos secundarios de la anticoncepción hormonal, como la disminución del deseo sexual, el aumento de peso y los cambios de humor. Esta percepción ha llevado a muchas mujeres a abandonar estos métodos, lo que podría estar contribuyendo indirectamente al descenso en el uso de protección durante las relaciones sexuales.
Además de la falta de educación sexual y el abandono de métodos anticonceptivos hormonales, las influencias culturales y sociales también desempeñan un papel en las decisiones de los jóvenes sobre el uso de condones.
Por otro lado, la Generación Z, que percibe el mundo como un lugar cada vez más peligroso, ha mostrado niveles elevados de ansiedad y depresión. Según New York Post, esta generación está constantemente expuesta a mensajes alarmantes sobre temas como el cambio climático y la inseguridad, lo que contribuye a su estado de salud mental y, posiblemente, a su comportamiento sexual.
La moda y el condón: una relación en evolución
En un giro inesperado, la industria de la moda ha intentado revitalizar la imagen del condón y promover su uso a través de colaboraciones innovadoras y campañas impactantes. Diseñadores de renombre, como Glenn Martens para Diesel y marcas icónicas como Saint Laurent, han lanzado colecciones que incluyen condones como parte de sus productos, buscando crear conciencia sobre la importancia del sexo seguro. Aunque estas iniciativas reflejan un esfuerzo por cambiar la percepción del condón y hacerlo más atractivo para los jóvenes, la realidad muestra que el uso de este método de protección está en declive.
A pesar de los esfuerzos de la moda por hacer del condón un accesorio “de moda”, informes recientes han destacado que su uso ha disminuido significativamente, influenciado por la disponibilidad de otros métodos anticonceptivos y una menor preocupación por enfermedades como el VIH.