El Bayern Múnich venció al PSG y salió airoso del Allianz Arena gracias al solitario tanto de Kim Min-Jae. Un partido muy parejo que se decidió por errores de los de Luis Enrique. Primero en la salida de Safonov en el gol y, en la segunda parte, la expulsión de Dembélé a falta de media hora de encuentro. Tres puntos muy importantes para un Bayern que aumenta puestos en la clasificación mientras que el conjunto parisino necesita un milagro para meterse en los play-offs.
Partido con mucho ritmo el que se vivió en el Allianz Arena los primeros 45 minutos. Los bávaros salieron muy metidos al encuentro en busca de los tres puntos tan importantes que había en juego. Prueba de ello fue el primer aviso de Musiala a los cinco minutos. Sin embargo, el PSG tardó en entrar en dinámica, pero, cuando se metió al partido, la igualdad se reflejó en el encuentro.
Fue un ida y vuelta en toda regla. En tan solo dos minutos, cualquiera de los dos equipos pudo adelantarse en el marcador. Primero Davies con una de sus características arrancadas en la que el balón se marchó relamiendo el palo y otra de Zaïre-Emery que, a pase de Fabián, falló a placer en la ocasión más destacada del conjunto parisino en la primera parte.
Hubo constantes llegadas de ambos conjuntos que denotaron la gran importancia que tenía este partido. No iba a ser hasta el minuto 38 cuando, tras un córner ejecutado por Kimmich cerrado a primer palo, Safonov despejó mal y Kim Min-Jae remató a placer para poner el primero en el luminoso del Allianz Arena.
En el segundo acto, los de Luis Enrique salieron enchufados en busca de empatar lo antes posible. Por otro lado, el conjunto alemán sufría la presión en campo contraria de los visitantes. Cuando mejor estaba el PSG, Dembélé recibió la segunda tarjeta amarilla y fue expulsado en el minuto 57" tras cortar una contra.
A raíz de la expulsión, el PSG dejó de pisar el acelerador con uno menos y el partido se le puso de cara a los locales. Mucho más tranquilos con el balón y sin prisa para generar ocasiones.
El equipo parisino bajó los brazos y aguantaron como pudieron la ventisca alemana. Musiala se sacó de la chistera un misil que se estrelló contra el palo en el 74". Finalmente, los bávaros encadenaron su séptima portería a cero consecutiva entre todas las competiciones y se llevaron la victoria en casa ante un PSG que se le complica su clasificación en la Champions.
