
Desde Villa Tunari y como protagonista de un congreso para refundar el instrumento político, el expresidente Evo Morales, en su discurso, aseguró que su movimiento no está dividido, enumeró a los traidores y se burló de los opositores. Además, a pesar de estar inhabilitado, el líder cocalero afirmó que está listo para participar en las elecciones presidenciales del 17 de agosto y que ganará con más del 60% de los votos de la población.
Al grito de “Evo no está solo C…”, de los miles de seguidores que asistieron al estadio de Villa Tunari, el exmandatario saludó y exclamó: “¡Que viva Bolivia! ¡Que viva el instrumento político! ¡Que viva la patria grande! Patria o muerte”. Además, agradeció a quienes asistieron, dejando su chacra, su ganado y trabajo personal.
Aseguró que la presencia de los asistentes es la muestra de la unidad del pueblo en torno al instrumento político. “Nos dicen que estamos divididos, pero que vea el mundo entero, este es el instrumento político, estamos con la verdad, con la legalidad, solo este pueblo va a defender la economía, y a Bolivia”, precisó.
Recordó que hace más de 20 años se ha organizado el instrumento político y desde el primer momento estuvieron en la mira del imperio. Con la Asamblea por la Soberanía de los Pueblos, los ex miembros de la Corte Nacional Electoral rechazaron su legalidad, por instrucción de la embajada de Estados Unidos (EEUU).
“Comenzamos con una sigla prestada la Izquierda Unida, en 2002 nos robaron la elección, en 2005 ganamos con el MAS. Durante el golpe intentaron proscribirnos, hemos defendido, ahora se repite la historia, nos roban ilegalmente la sigla del MAS. El estatuto del MAS-IPSP fue aprobado por el Tribunal Supremo Electoral en 2023, reconocido por el Tribunal Constitucional, solo el presidente del MAS, puede convocar a Congreso”, remarcó.
Añadió que ahora se pretende eliminar al Frente para la Victoria, pero con sigla prestada como ya ocurrió, antes, se ganará la elección y que en esta jornada ante “80 mil personas”, presentes se va demostrar al mundo que “somos el único movimiento con visión de país”.
En proyección, Morales señaló que su deseo es que hacía 2050, Bolivia no tenga deuda interna, ni externa, y que el PIB aumente de 42 mil millones de dólares a 130 mil millones de dólares. “Ahora se han farreado la plata, hay cuatro deudas internas, nunca hubo eso en mi gestión, lamentablemente hemos vuelto a ser un país limosnero, se pide aprobar créditos en la Asamblea hasta para comprar combustible”, puntualizó.
Además, en su discurso, el exmandatario enumeró a los enemigos del instrumento político y recordó que el primer candidato en 1997 fue Alejo Veliz, pero en 2002 con la derecha, luego Román Loayza, pero ni así se logró dividir al movimiento social y en 2009 el MAS ganó las elecciones con el 64%. Es por eso que no se puede claudicar en la lucha. “Esa es la conciencia del pueblo boliviano, como dice una canción de los hermanos de sud Yungas, digan lo que digan, hagan lo que hagan, Evo presidente”, subrayó.
También se burló de Samuel Doria Medina, de quién dijo: es el “eterno candidato y eterno perdedor” y aseguró que Jorge Quiroga, Carlos Mesa y Manfred Reyes Villa, jamás ganaron una elección y que ahora nuevamente están divididos.
“Ellos que se dividan, nosotros no podemos estar divididos, nosotros ganamos todas las elecciones, en 2019 nos hicieron un golpe, ahora somos ganadores de lejos. No estamos divididos, si mañana fueran las elecciones, ganaríamos con más del 60% de los votos. En la derecha están peleados entre ellos, el Gobierno, hace una hora en La Paz, no pudo reunir ni a mil personas con funcionarios públicos”, recalcó.
Morales, durante su discurso, también manifestó que de las diferentes comisiones del Congreso, deben salir propuestas para gobernar durante los próximos 40 años y demostrar que Bolivia puede ser una potencia económica y no un país limosnero.