
Jeanine Añez, consiguió una nueva victoria judicial, luego de que el Tribunal Cuarto de Sentencia de El Alto se declarara incompetente para procesarla en la vía ordinaria en el caso Senkata al considerar que debe ser sometida a juicio de responsabilidades en su calidad de expresidenta del Estado.
La defensa de Añez presentó un recurso de excepción de incompetencia que fue aceptada por el tribunal. La determinación surge días después que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) ordenara la revisión de los plazos de la detención preventiva de la exmandataria, del gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho y del exlíder cívico de Potosí, Marco Antonio Pumari.
La audiencia se prolongó por más de cinco horas. Añez participó de manera virtual en la misma desde el penal de Miraflores en La Paz. El gobierno de Luis Arce impulsó los procesos en la vía ordinaria al no contar con dos tercios en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) para procesarla mediante juicio de responsabilidades.
Añez también será procesada mediante el denominado Caso de Corte en el proceso denominado EBA, en la que se la acusa de un nombramiento irregular en la Empresa Boliviana de Alimentos (EBA). Inicialmente por este caso también era juzgada en la vía ordinaria.
La expresidenta ya fue condenada en primera instancia en el caso Golpe II a 10 años de prisión. Fue excluida del caso Golpe I al considerar que no podía ser juzgada dos veces por los mismos delitos.
“Simplemente quiero decir que la historia recordará que este día se recordará la legalidad. Volvió la independencia judicial y se dio paso a una Bolivia más justa. ¡que viva Bolivia!”, dijo Añez al final de la audiencia este lunes.
Durante la audiencia, Añez también refutó la acusación. “Murieron personas, pero se han equivocado de victimarios porque nosotros no cometimos esos delitos; los militares que llegaron a Senkata lo hicieron a las 14:00, y los hechos ocurrieron a las 08:00”, remarcó.
La exmandataria enfatizó que en ninguna parte del Decreto Supremo 4078 aprobado por su gabinete, referido a la movilización de las Fuerzas Armadas, se da piedra libre para matar. “Lo que aquí se hace no es justicia, es una persecución política disfrazada de proceso judicial, (pero) yo no me niego a la justicia, me niego a una acusación falsa que ha hecho la Fiscalía sin ninguna investigación por instrucciones del poder de turno”, dijo Añez.
El 19 de noviembre del 2019, una semana después de la asunción de Añez como presidenta, hubo hechos de violencia durante un operativo militar – policial afuera de la planta de Senkata, que estaba rodeada por afines al MAS. Se reportaron 10 fallecidos entre los manifestantes.