Kylian Mbappé volvió a erigirse como el salvador del Real Madrid al marcar los cuatro goles con los que su equipo derrotó 4-3 al Olympiacos, este miércoles en Atenas, por la quinta jornada de la Liga de Campeones. El francés apagó cualquier conato de crisis en el club blanco con una actuación estelar que mantuvo vivo al equipo en un partido lleno de angustia.
El encuentro comenzó cuesta arriba para el Madrid, que recibió el 1-0 a los ocho minutos tras un disparo de Chiquinho que sorprendió a Lunin, titular ante la ausencia de Courtois. Pero la respuesta merengue fue fulminante: Mbappé firmó un triplete en apenas siete minutos —22’, 24’ y 29’— para darle la vuelta al marcador y encaminar un triunfo que, sin embargo, terminó siendo más sufrido de lo esperado.
En el segundo tiempo, Olympiacos recortó distancias con un cabezazo de Mehdi Taremi (52’), aunque Mbappé volvió a aparecer al minuto 60 para completar su póker y devolver la tranquilidad parcial al conjunto de Xabi Alonso. Pero la relajación madridista dio vida al local, que descontó nuevamente con El Kaabi (81’) y rozó el empate con llegadas peligrosas de El Kaabi (83’) y Strefezza (85’).
Con nueve goles en esta edición de la Champions, Mbappé se consolidó como máximo artillero del torneo, reforzando una temporada en la que también lidera la tabla goleadora de LaLiga con 13 tantos. Tras el partido, el francés valoró el triunfo: “No era fácil ganar aquí. Empezamos mal, pero pudimos imponer nuestra calidad”, afirmó a Movistar.
El Madrid, que sumó 12 puntos de 15 posibles, recupera impulso tras la derrota sufrida en Anfield ante el Liverpool y los dos empates consecutivos en LaLiga frente a Rayo Vallecano y Elche. Xabi Alonso, bajo críticas por decisiones recientes, celebró el triunfo como un necesario punto de inflexión: “Lo importante era ganar y romper la dinámica. Necesitábamos esta victoria para seguir en la pelea del Top 8”, declaró.
El partido dejó además un dato histórico: fue el primer triunfo oficial del Real Madrid en Atenas, después de tres derrotas y seis empates en visitas anteriores a la capital griega. Una noche caótica, de brillo individual y sufrimiento colectivo, que terminó con el equipo blanco respirando aliviado.
El Madrid cerrará la fase de grupos el 10 de diciembre ante el Manchester City en el Santiago Bernabéu, mientras que Olympiacos, con apenas dos puntos, visitará al Kairat Almaty en Kazajistán para intentar sostener sus mínimas opciones de clasificación.
