Con armas largas y los rostros cubiertos, al menos cinco hombres irrumpieron en una vivienda de la comunidad La Enconada, en la provincia Ichilo de Santa Cruz, y secuestraron a un ciudadano extranjero durante el fin de semana.
Horas después del rapto, los presuntos secuestradores se comunicaron con personas cercanas a la víctima y pidieron 300.000 dólares para su liberación.
Más tarde, redujeron la exigencia a 200.000 dólares, según datos preliminares que siguen bajo verificación.
Según el comandante policial de Ichilo, Efraín Gutiérrez, las imágenes muestran a varios individuos a bordo de un vehículo Noah blanco retirando por la fuerza a un hombre identificado como Alexander Calle.
La Policía abrió una investigación y ya trabaja con las imágenes captadas por las cámaras del lugar. Según los primeros reportes, los autores llegaron en un vehículo blanco, descendieron rápidamente y entraron a la casa sin dar tiempo a que nadie reaccionara. Allí apuntaron con sus armas a los vivientes y exigieron que nadie se moviera. Todo quedó grabado en las cámaras de seguridad instalados en el domicilio.
En medio del caos, los hombres rodearon a un ciudadano peruano, lo encañonaron y lo obligaron a salir. Lo llevaron por la fuerza hasta el vehículo, mientras mantenían sus armas levantadas y dirigidas hacia las otras personas de la vivienda, como una forma de evitar cualquier intento de intervención.
Los agresores vestían ropa que, según los investigadores, se asemejaba a uniformes de fuerzas del orden.
