
El Real Madrid cumplió en Talavera, pero estuvo lejos de una noche tranquila. El 2-3 le permitió avanzar a los octavos de final de la Copa del Rey, aunque necesitó del liderazgo de Kylian Mbappé y de una intervención salvadora de Andriy Lunin en el último suspiro para evitar la prórroga frente a un rival de Primera RFEF que rozó la hazaña.
Mbappé, que jugó los 90 minutos pese a no haber entrenado la víspera, firmó un doblete y quedó a un solo gol de igualar el récord de Cristiano Ronaldo (59 tantos en 2013), con un partido más por disputar en este 2025. El francés abrió el marcador desde el punto penal tras una mano en el área y fue determinante en el segundo tanto, un autogol de Manuel Farrando antes del descanso.
El 0-2 resultó engañoso. El equipo de Xabi Alonso no logró imponer control y Talavera encontró premio a los 80 minutos con el gol de Nahuel Arroyo, tras un desajuste defensivo. Mbappé pareció sentenciar en el 88, beneficiado por un error del arquero Jaime González, pero el conjunto local volvió a golpear con el tanto de Gonzalo Di Renzo en el 91.
El cierre fue de máxima tensión. En el 93, Lunin despejó un cabezazo de Isaiah Navarro que llevaba destino de prórroga y sostuvo a un Real Madrid que sufrió más de lo esperado, pero terminó sellando su pase a octavos tras una noche incómoda en Talavera.