Oriente Petrolero vive horas de tensión institucional. El Tribunal Superior de Apelación (TSA) de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) emitió un fallo a favor de René Urioste, dejando sin efecto la sanción que pesaba sobre el exdirigente y habilitándolo para retomar sus funciones a partir del próximo 10 de diciembre.
Urioste ejercía como primer vicepresidente del club, pero tras su suspensión, la dirigencia quedó en manos de la segunda vicepresidenta, Mary Cruz Gisela Aguilar. Con el nuevo fallo, el dirigente deberá asumir la presidencia el 10 de diciembre, considerando que Ronald Raldes, elegido presidente por votación, mantiene su sanción vigente hasta el próximo año.
Según el fallo, tanto el Tribunal de Ética como el TSA concluyeron que Urioste no cometió los hechos señalados en la denuncia anónima presentada en 2024 ante Conmebol y luego derivada a la FBF. Las instancias disciplinarias determinaron que la única persona involucrada plenamente en los hechos denunciados fue Raldes, lo que llevó a la revocatoria de la sanción contra Urioste.
Johan Zambrana, abogado de Urioste, explicó al programa Solo Fútbol Radio que la apelación presentada por Raldes no fue admitida porque no cumplió con el pago del arancel correspondiente, requisito establecido en la normativa disciplinaria. Sin este trámite, el dirigente quedó sin posibilidades de activar otro recurso para modificar su sanción, que se mantendrá firme.
En medio del proceso, surgieron rumores sobre una posible asamblea para la próxima semana, la renuncia del directorio de Mary Cruz o incluso la conformación de una comisión interventora. Sin embargo, Zambrana advirtió que esas medidas podrían constituir una ilegalidad, debido a que vulnerarían los derechos de miembros suspendidos (Urioste y Raldes) y generarían un perjuicio económico para la institución.
Por ahora, Urioste decidió no dar declaraciones hasta después del 10 de
diciembre, cuando recupere oficialmente sus funciones.
El inminente retorno del dirigente se da en un escenario crítico para Oriente, que atraviesa una delicada situación económica. Este jueves se conoció que los jugadores Junior Sánchez y Enrique Flores, ambos exintegrantes del plantel, solicitaron al Tribunal de Disciplina Deportiva la resta de puntos al club por incumplimiento de pagos. De prosperar la demanda, la institución podría perder seis unidades y comprometer seriamente su aspiración de obtener un premio internacional.
