La Confederación Nacional de Panificadores Artesanosde Bolivia (Conapaabol) afirmó que el Gobierno “se está aplazando en el tema de la subvención” a la harina, debido a que hasta la fecha no se concreta la anunciada “digitalización” para la provisión de este insumo, situación que —según el sector— dificulta una eventual rebaja en el precio del pan de batalla.
En entrevista con el programaHagamos Democraciade la red Erbol, el ejecutivo de Conapabol, Everth Baltazar, aclaró que la institución no defiende intereses personales de su exejecutivo Rubén Ríos - actualmente detenido en la cárcel de San Pedro por corrupción - sino al conjunto del sector panificador, que vive un escenario de incertidumbre respecto al precio referencial de la harina a través de Emapa.
En tanto no llegue una alternativa concreta del Gobierno, advirtió que ven difícil bajar el precio del pan de batalla.
Baltazar consideró que el Gobierno está dilatando la solución y, en ese proceso, “está haciendo quedar mal al sector panificador ante la población”. Por ese motivo, pidió comprensión a la ciudadanía y recordó que el precio del pan se mantuvo sin incrementos durante 15 años. “¿Qué producto puedes comprar ahora con 50 centavos? Ni un dulce, ni una pastilla. Eso quisiera que nos entienda la gente”, manifestó, al lamentar que el tema del pan se haya politizado.
El dirigente demandó al Gobierno la instalación de mesas de trabajo para definir el precio final del pan de batalla y admitió que, si se mantiene el actual costo de 0,80 centavos por una unidad de 60 gramos, “¡magnífico!”, pese a reconocer que se trata de un producto esencial que afecta principalmente a la población más humilde.
Asimismo, recordó que desde septiembre del año pasado el sector gestiona ante Emapa la devolución de la inversión realizada por los panificadores para comprar harina y sostener el precio anterior.
Detalló que, hasta el 15 de septiembre de 2025, las federaciones depositaron 180.000 quintales a nivel nacional, cuyo costo que —por acuerdo— el Estado debía reembolsarles. “Nosotros no estamos exigiendo aquí si continúa la subvención; lo que queremos es arreglar ese saldo, incluso de agosto hay un saldo”, puntualizó.
Respecto a un eventual levantamiento de la subvención a los carburantes, Baltazar alertó que sería “otra situación muy alarmante” y que obligaría a revisar nuevamente la hoja de costos el próximo año. “Nos espera un año bien difícil. El Gobierno está tomando medidas, tal vez, muy bruscamente, cuando debería llevar todo con calma”, advirtió.
Expresó el malestar del sector al señalar que, mientras se elimina la subvención a la harina, a los grandes empresarios se los beneficia con la eliminación de impuestos.
Indicó que desde el 4 de diciembre enviaron notas al Viceministerio de Comercio y Logística Interna sin recibir respuesta, por lo que anunciaron que acudirán directamente al presidente Rodrigo Paz, ante la percepción de que no se estaría exigiendo a los ministerios el cumplimiento de sus funciones.
